domingo, 6 de mayo de 2018

Tensei Shitara Ken Deshita 178


Capítulo 178. Royce

Actualmente nos encontramos en nuestra posada; Han transcurrido 30 minutos desde que nos encontramos con el Señor de las Bestias.
[¿Quieres descansar este día?]
[Estoy bien.]
Fran, cuyo rostro finalmente recuperó su color, negó con su cabeza. Tal parece que ella se ha recuperado completamente después de mantenerse alejada del Señor de las Bestias el tiempo suficiente.

[¿Estás segura? No te fuerces, ¿de acuerdo?]
[Nn. Iré a tomar un baño.]
A Fran le gustan los baños, por lo que tener uno para cambiar este ritmo suena una muy buena idea.
Ella podría tardar al menos media hora en regresar. Normalmente, utilizaría el tiempo que ella pasaría en el baño para practicar el uso de mis habilidades, pero en esta ocasión será diferente. Tengo cierta cosa en mente.
[Hey Urushi, vamos a evaluar al Señor de las Bestias y a sus compañeros.]
[¿On?]
[Vamos a quedarnos por los alrededores del Gremio, evaluarlos en el momento en que ellos lo dejen, y entonces escapar corriendo como si el infierno nos persiguiera.]
[Own…]
[No te preocupes, no es como si fuésemos a buscar pelea o algo por el estilo.]
[Ouwn…]
Urushi tiene miedo del Señor de las Bestias, por lo tanto no está exactamente dispuesto, pero yo le insistí de todos modos debido a que quiero saber más sobre sus habilidades, especialmente considerando que es posible para nosotros encontrarnos con el peor de los escenarios, donde podríamos acabar enemistándonos con ellos.
Necesitamos saber si posee alguna habilidad que los ayudaría en una persecución. Sería difícil escapar de ellos si la tuviesen, pero en caso contrario podría ser bastante fácil. La primera de estas dos posibilidades implica que hay una posibilidad de que tengamos que idear algunos esquemas antes de tiempo. También está el hecho de que examinar sus habilidades con más detalle nos permitiría aprender acerca de lo que podríamos terminar teniendo en un futuro.
Las cosas lucen bastante bien por ahora. Goldalfa y el Señor de las Bestias son tipos más orientados al combate. Ninguno tenía demasiadas habilidades que los ayudarían en una persecución o búsqueda. Ambos sí tenían un nivel bastante alto, pero aun así no son suficientes para que realmente puedan evitar que escapemos de ellos. Por lo tanto, todos nuestros problemas recaen en el otro guardia y el cochero, y perdí la oportunidad de evaluar a ambos.
Existe la posibilidad de que el Señor de las Bestias tenga una división encubierta de operaciones similar a los ninjas, la cual lo protege desde las sombras.
[No te preocupes. No necesito que te acerques demasiado a ellos ni nada por el estilo. De hecho, sería mejor para nosotros estar bastante lejos.]
[…On.]
[Tratemos de evaluarlos muy rápido. Vamos a retroceder por completo si ya no están en el gremio, ¿de acuerdo?]
[…On.]
El miedo de Urushi al Señor de las Bestias lo hizo reacio a seguir el plan que sugerí.
Bueno, solo preguntarle no funcionó. Parece que tengo que intentar darle la zanahoria.
Aparentemente, no se supone que debas entrenar perros a través de un sistema basado en recompensas o méritos, dado que eso los llevaría a hacer cosas solo cuando reciban golosinas. Dicho eso, sin embargo, eso mismo probablemente no es aplicable a Urushi. Sé que yo mismo no siempre soy exactamente consciente de ello, sin embargo Urushi es en realidad una Bestia Demonio, y no un perro.
[Bueno, ¿qué tal esto? Te prepararé un curry súper picante después de que regresemos. Será tan picante que incluso a Fran le parecerá demasiado picante para comer.]
[¡Own…!]
Bueno. Parece que mordió el anzuelo.
[¡Bien! ¡Vamos a hacerlo!]

                             ◇◆◇      

Me ubiqué sobre un techo que posee un buen ángulo en el gremio no mucho después de haber terminado de negociar con Urushi.
Mi compañero lobo se encuentra escondido en una posición un poco más lejos. Es más seguro para mí estar solo. Soy solo una espada, por lo que la mayoría de las personas no se darían cuenta de mí, siempre y cuando me asegure de utilizar Aislar Presencia. Ni siquiera importa si poseen o no Detectar [Evaluación], puesto que probablemente solo pensaran en mí como un elemento misterioso que es capaz de evaluar cosas a lo sumo. Además, probablemente ni siquiera llegaría a eso. Detectar [Evaluación] simplemente le dijo a su usuario que está siendo evaluado. No sería capaz de identificarme como aquel que está realizado la Evaluación en primer lugar. Además, probablemente no podrían rastrearme hasta Fran, incluso si lo hicieran. ¿Quién en su sano juicio sospecharía que la espada que Fran estaba llevando es la misma con la cual habían sido evaluados?
Dicho esto, uno nunca puedes ser demasiado cuidadoso, así que me aseguré de encoger mi cuerpo tanto como fuese posible mientras también cambie mi forma.
[Hmmm, debería ser suficiente.]
La forma que tomé es similar a una bola de metal con un aspecto extraño y, por lo tanto, es más que suficiente como un disfraz.
La razón por la cual hice que Urushi me acompañe es debido a que necesito un par de pies para recorrer la ciudad. Soy una espada, por lo que no puedo pasear. Quiero decir, había considerado utilizar un doppelganger, pero las habilidades de mis dobles tienen reducido sus niveles, lo que a su vez me haría más susceptible a ser descubierto. Pensé que el sigilo era más importante que cualquier otra cosa en este momento, así que elegí la posibilidad de llevar a cabo toda la operación solo.
La presencia del Señor de las Bestias es suficientemente obvia, especialmente teniendo en cuenta que no está intentando ocultar su presencia. Gracias a todo eso, logré sentirlo con bastante facilidad, incluso desde fuera del gremio.
Después de pensarlo un poco, me di cuenta de que el Señor de las Bestias no parecía tan intimidante en absoluto cuando se encontraba en el carruaje más temprano este día. La discrepancia entre esos dos estados me llevó a cuestionarlo de inmediato. ¿Había estado intentando ocultar su aura en aquel entonces? ¿O quizás es todo lo contrario? ¿Decidió recientemente comenzar a parecer todo aterrador porque tenía que lidiar con Dias o algo así?
Bueno, Dias parece un poco joven y todo, pero él aun es técnicamente un hombre viejo. Con suerte, no recibió un ataque al corazón.
Uno de los únicos problemas que realmente puedo ver con todo este plan es el hecho de que no sé cuánto podría durar esta reunión. Idealmente, quiero volver antes de que Fran termine su baño, por lo que probablemente solo tengamos otros 15 minutos.
Otra cosa que podría arruinar totalmente mis planes es la posibilidad de que el grupo del Señor de las Bestias decida dejar la habitación de Dias a través de la Puerta Dokodemo que utilizaron para ingresar al gremio en primer lugar. Ni siquiera tendría la oportunidad de evaluarlos si ellos no salieran por la puerta principal del Gremio.
Afortunadamente, pronto descubrí que todas mis preocupaciones fueron innecesarias, ya que sentí que comenzaron a moverse, y más específicamente, dirigiéndose en dirección a la entrada del edificio.
[De acuerdo, solo tengo una oportunidad para esto. Tendré que largarme de aquí en el momento en que termine de evaluarlos.]
Probablemente esto no sería un problema si ninguno posee Detectar [Evaluación], pero saben, es por las dudas.
[¡Allí están!]
El Señor de las Bestias se encuentra liderando el grupo. Inmediatamente seguido por Goldalfa. El guardia más corto que vimos anteriormente había tomado la retaguardia. El cochero había desaparecido, por lo que decidí evaluar al tercer tipo y dejarlo por ahora.
[¡Demonios, sí! ¡Funcionó! ¡Me voy largo de aquí!]
Ejecuté el plan de escape que pensé por si acaso tenían habilidades que les permitieran perseguirme. Es decir, me transporté hacia Urushi, lo agarré y comencé a enviar usar Salto * Largo consecutivamente en dirección a la posada mientras también ocultaba mi presencia. Pensé que probablemente esto sería irse un poco por la borda, sin embargo, terminé haciéndolo por si acaso. Escogí la opción más segura posible porque echar un vistazo al estado del Señor de las Bestias me había hecho sentir un poco nervioso.
Resultó que el último guardia era tan ridículamente fuerte como esperaba que fuera.

Nombre
Royce
Edad
46
Raza
Hombre-Bestia (Conejo Gris - 
Tribu Conejo Plateado)
Trabajo
Transportista
Condición
Normal
Estado
Nivel
74/99

HP
401
MP
1199
Fuerza
151
Resistencia
212
Agilidad
419
Inteligencia
401
Magia
709
Destreza
127
Habilidades
Sentir [Suelo]
Nv.4
Cavar
Nv.2
Sigilo
Nv.2
Magia [Recuperación]
Nv.8
Magia [Luz Lunar]
Nv.4
Detectar [Presencia]
Nv.7
Aislar [Presencia]
Nv.4
Magia [Espacio-Tiempo]
Nv.4
Patada [Técnicas]
Nv.4
Patada [Artes]
Nv.4
Movimiento Instantáneo
Nv.4
Magia [Purificación]
Nv.3
Sentir [Vibración]
Nv.3
Bastón [Técnicas]
Nv.5
Bastón [Artes]
Nv.6
Magia [Tierra]
Nv.3
Resistencia
[Anormalidad Mental]
Nv.7
Resistencia
[Condición Anormal]
Nv.4
Salto
Nv.4
Magia [Suelo]
MAX
Magia [Apoyo]
Nv.5
Resistencia [Magia]
Nv.8
Detectar [Magia]
Nv.4
Dominar Poder Mágico
Asesino de Goblins
Regeneración Automática MP
Mejorar [Audición]

Habilidad Inherente
Despertar
Puerta Dimensional
Cresta Luna Creciente
Títulos
Asesino de Orcos
Asesino de Goblins
Aquel que Protege
Conquistador de Mazmorra
Mago de Tierra
Aventurero Rango A
Equipamiento
*Bastón de Piedra Lunar Plateada
*Ropas de Conejo Luna Creciente
*Manto de Espíritu de Tierra
*Brazalete de Guardaespaldas
*Anillo de Succión de Magia

Parecía que aquella Puerta Dokodemo la había conseguido de su trabajo como forma de una Habilidad Inherente, y en realidad se conocía como la habilidad Puerta dimensional.
Cielos, eso fue angustioso.
[Estamos de vuelta~]
[On.]
Tal parece que me había equivocado y acabé comiendo demasiado tiempo, ya que Fran había regresado antes que nosotros.
Inmediatamente reconocí el estado en el que ella estaba como algo anormal. Las luces estaban apagadas, y ella estaba en la parte superior de la cama con la cara en sus rodillas y sus brazos alrededor de ellas.
[Hey Fran, ¿por qué las luces están apagadas?]
[¡Nn...!]
Fran corrió hacia nosotros en el momento en que la llamamos. Ella luego envolvió sus brazos alrededor de Urushi y enterró su rostro en su pelaje.
[Woah. ¿Qué sucede?]
[¿On?]
[Maestro... Urushi...]
[¿Qué pasa contigo de repente?]
[Nada…]
Sus palabras estaban en contraste directo con su expresión. Tenía los ojos enrojecidos y parecía bastante inquieta. Parecía como si hubiese estado llorando.
[¿On’On?]
[Nn. Cosquillas.]
Ella no acabó animándose y sonriendo hasta después de que Urushi comenzó a lamerla.
Fue entonces cuando finalmente me golpeó. La fuerza del Señor de las Bestias había roto totalmente su voluntad, no hay forma de que ella ya se hubiese recuperado de eso. Simplemente ella había estado poniendo una fachada para que no me preocupara.
Y luego estaba el hecho de que nosotros nos habíamos ido cuando ella regresó. Ella no estaba exactamente en lo que llamaría mentalmente segura ahora, así que terminó en un estado de ansiedad; estaba preocupada que la hubiésemos abandonado.
Y, por tanto, Fran, una chica dela cual siempre pensé que tenía nervios de acero, había terminado llorando.
Fui atacado por un sentimiento de culpa. Todo fue mi culpa. Yo podría haber evaluado al guardia del Señor de las Bestias en cualquier momento. Realmente no tuvo mucho sentido apartarme y haberlo hecho ahora, incluso si me sentía un poco preocupado de que terminemos convirtiéndonos en enemigos de ellos. No debería haber actuado según mis impulsos. No debería haber dejado a Fran sola.
[Lo siento.]
[No importa. Pero dormiremos juntos esta noche.]
[¿Huh? Espera, ¿Qué? Estás hablando conmigo, ¿verdad?]
[Nn.]
[Pero soy una espada, ¿sabes? No soy exactamente lo que llamarías ‘abrazable’.]
[No importa.]
[Bueno, siempre y cuando estés bien con eso.]
[Urushi también.]
[¿On?]
Y así, terminé pasando la noche como la almohada del cuerpo de Fran. Quiero decir, posee una funda y todo, pero técnicamente aún soy una espada, así que... No puedo ver exactamente cómo esto incluso es ligeramente confortable, pero como sea.
Fran terminó quedándose dormida envuelta en el pelaje de Urushi mientras también ella estaba desesperadamente aferrada a mí con ambos brazos.
[Bueno. No tengo nada que hacer.]
No fui exactamente capaz de jugar con mis habilidades puesto que no quería despertar a Fran. Lo único que realmente podía hacer fue mirarla a la cara mientras ella dormía.
Saben, hacer esto de vez en cuando no parece tan malo.