lunes, 17 de abril de 2017

Honzuki no Gekokujou 04



Libros: Imposibles de Adquirir.

“Ahora bien, lo último en la lista es la carne. Vamos a conseguir un montón de ella, y luego vamos a tener salarla, o quizás ahumarla...”
Mi madre, quien ha finalizado de comprar nuestras frutas y verduras, se dirige hacia el centro del mercado. Allí, tal parece que los vendedores de carne se encuentran alineados contra la pared exterior.
“¿Por qué compramos tanta?”, pregunto.

“Tenemos que prepararnos para el invierno, ¿sabes?", responde mi madre. “Alrededor de esta época del año, todos los agricultores tienen que transportar su ganado para el año. Cualquier cosa que no logre atravesar el invierno será convertida en carne, así que esta época del año es cuando se vende la mayor cantidad de carne. Los animales también han estado comiendo mucho para prepararse para el invierno, así que su carne es muy gruesa y deliciosa.”
“... Umm, en el invierno, ¿el mercado también se va?”
“Por supuesto que sí, ¿sabes? No hay muchas verduras cosechadas durante el invierno, así que el mercado no es abierto muy a menudo.”
Ahora que lo pienso, esto es obvio, pero ese pensamiento no se me había ocurrido en absoluto. En Japón, antes de que el cultivo en invernaderos se transformase en algo común, las verduras eran vendidas estacionalmente y antes de que fuesen desarrollados los métodos de distribución, todo era cultivado localmente. Puedes mantener la comida fresca durante largos períodos de tiempo con congeladores o refrigeradores, pero antes de que estas cosas existieran, necesitabas conservar la comida en su casa.
“... nunca me he preparado para el invierno”, murmuro.
“¿Has dicho algo?” Pregunta mi madre.
“Nuh-uh.”
Conservando comida en casa, huh... ¿Dónde en ese diminuto apartamento vamos a conservar algo? Aquel cuarto de almacenamiento no es suficientemente grande, ¿cierto? Geez, me alegro de que soy una niña pequeña; Soy tan pequeña que sólo me metería en el camino si intento ayudar, así que no voy a ser regañada cuando no lo haga.
“... ¡Erk, apesta!”
“¡Ese es el olor de la carne!”
El hedor comienza a volverse insoportable mientras nos acercamos a los carniceros. Pincho mi nariz para detener el olor, pero mi madre continua caminando hacia adelante, haciendo parecer que esto no era nada fuera de lo común.
¿Se supone que la carne huele así? Ughhh, tengo un mal presentimiento sobre esto...
Incluso a pesar de que mi nariz está tapada, el aire es tan sucio que el sabor mismo de él hace humedecer mis ojos cuando finalmente llegamos a la fila de las carnicerías. Sobre los mostradores, aparte del tocino y el jamón que esperaba, piernas de carne están alineadas, aun atadas desde los pies y siendo reconocibles como partes de animales. Dentro de la tienda, animales muertos, drenados de sangre, oscilan desde las vigas. Conejos y aves se alinean en las estanterías, sus ojos abiertos de par en par y sus lenguas colgando fuera de sus bocas.
¡¡Gyaaaaaaah!!" grito.
“¿Qué sucede, Maine?”
Para ser honesto, para alguien como yo, quien sólo ha visto carne cruda después de que ya ha sido completamente desmembrada, cortada en pedacitos, y puesta en paquetes, las tiendas de carnicerías de este mundo son ligeramente demasiado estimulante. Todos los pelos de mi cuerpo están de punta, lágrimas fluyen por mi cara, y cierro mis ojos para bloquear la terrible vista. Sin embargo, la única imagen que atrapé permanece fija en mi mente, y no desaparece por mucho que quiera olvidarla.
“¿Maine? ¡¿Maine?!”
Mi madre me sacude de lado a lado. En ese instante, un cerdo grita cuando comienza su disección, y mis ojos se abren de golpe. Gente sonriendo se ha reunido a mi alrededor, observando y esperando ansiosamente mientras un animal es asesinado justo enfrente de ellos.
¿Por qué lucen así de alegre, chicos? ¡¿Por qué estás sonriendo tanto?! ¡Deténganse! ¡Deténganse! ¡Deténganse! ¡Es aterrador!
“Urkh...”
El cerdo grita una vez más cuando el cuchillo entra en su interior. Mi pequeño grito se une a él, y me desmayo en el acto.
Algo está siendo vertido en mi boca. Es un líquido duro, astringente, extremadamente estimulante el cual huele como un alcohol fuerte. Desde que no estoy lo suficientemente despierta como para beberlo apropiadamente, fluye directamente por mi tráquea. Salto sobre mis pies, con mis ojos muy abiertos, y comienzo un enorme ataque de tos.
*¡Tos! ¡Tos! ¡Tos!*
¿Es realmente alcohol? ¿Qué idiota tan increíble se atrevería a deslizar a un líquido tan fuerte por la garganta de una indefensa e inocente niña? ¿Qué habrías hecho si me hubieras intoxicado con el alcohol?
Mi madre está a mi lado, sosteniendo una botella de alcohol.
“Maine, ¿estás despierta? Ahh, es un alivio, estoy tan contenta de poder despertarte.”
“¡Tos! … ¡¿Mamá?!”
Con un gran suspiro de alivio, mi madre me abraza fuertemente. Podría no ser muy bueno poner las cosas en palabras en este momento, pero puedo hablar mi mente ahora, ¿cierto?
¡No empujes un alcohol tan fuerte por la garganta de una niña pequeña! Especialmente no lo hagas con una niña que no sólo tiene una constitución débil, ¡sino que también acaba de recuperarse de una fiebre tan alta que ella pensó que iba a morir! ¡¿Estas intentado matarme?! ¡¿Eres una idiota?! ¿Quieres que muera?
“Muy bien entonces, Maine. Ahora que estás despierta, regresemos a buscar esa carne.”
“¡¿Qué?!”
Un escalofrío me atraviesa. Aquel espantoso espectáculo ya ha sido grabado en mi memoria. Destella ante mis ojos como una ilusión, y sólo la memoria de él provoca que mi piel se vuelva de gallina. No quiero volver allí. Esta mujer, ella utilizo un alcohol tan fuerte para revivir a una niña, y ahora está tomando a la chica que literalmente simplemente se desmayó al observar al carnicero y arrastrándola de regreso hasta él... ¿podría ser que ella sea algo bruta?
“...Ummmm, aun no me siento bien,” digo. “Voy a quedarme aquí. ¡Mamá, ve!”
“¿Eh? Pero…”
Le doy a mi vacilante madre una mirada de soslayo, entonces giro en el lugar para mirar a la señora que atiende la tienda. Necesito asegurar mi posición antes de que ella me arrastre.
“Disculpe, pero ¿podría dejarme esperar aquí?”, Le digo a la comerciante. “No seré ningún problema, voy a sentarme justo aquí.”
“Oh, eres muy educada para ser una niña tan pequeña,” ella contesta, con una risa seca y estridente. “Tu madre acaba de comprar un poco de licor, así que te dejaré quedarte un momento. Sería horrible si echara a una niña que no se sentía bien y ella tuviese otro accidente, ¿cierto? Tome cuidado de sus compras, señora, la vigilaré por usted.
Tal parece que esta mujer es la dueña de este puesto de licores, desde el cual mi madre acaba de comprar el alcohol que ella usó para revivirme. El anciano de la tienda de al lado también parece haber sentido compasión de mí, y me llama.
“Ven y espera aquí, señorita, de esa manera nadie vendrá por aquí e intentara robarte...”
Él me mueve a un punto detrás y entre los dos puestos y me ayuda a sentarme. Siento como el licor que se derramó por mi garganta se está revolviendo dentro de mí. En este momento, moverme demasiado podría ser peligroso. Si, por ejemplo, fuese a colapsar debido a una intoxicación aguda por alcohol, nadie sería capaz de averiguar el por qué.
Mientras me sentaba, distraídamente miraba el contenido de las dos tiendas. La tienda de bebidas alcohólicas parece haber recibido un nuevo envío de sidra, justo a tiempo para su temporada más popular, y los clientes vienen uno después del otro para comprar pequeños barriles de la misma. La tienda general, por otra parte, no tiene tantos clientes.
¿Qué es lo que vende una tienda general en este mundo?
Miro sobre las varias mercancías que están alineadas para la venta, pero en la mayor parte de ellas no tengo ninguna idea qué estoy mirando.
“Señor, ¿qué es estoo? pregunto, señalando una de las cosas aleatorias de un estante cercano.
“Oh, ¿no has utilizado uno de ellos antes, señorita? Esto es lo que utilizas cuando estás tejiendo. Oh, y éste es utilizado para cazar.”
Desde que no él tiene clientes en este momento, el anciano me explica con gusto lo que hace cada cosa, cuando ella apunto en sucesión. Hay demasiadas cosas aquí que se usan en la vida cotidiana por aquí de las cuales no sé nada. Excavo a través de los recuerdos de Maine, pero ella o no estaba muy interesada en estas cosas o ella realmente nunca aprendió acerca de ellas.
Mientras miro alrededor de los artículos se exhiben en los estantes con admiración, noto algo en la esquina más apartada. Quizás sea sólo un solo volumen, pero definitivamente veo el lomo dorsal de un masivo y voluminoso volumen. Es el tipo de encuadernación que usualmente sólo veía detrás de una vitrina en una biblioteca, con una cubierta de cuero y finas tapas doradas en cada esquina. Es tan enorme que no creo que pueda ni siquiera sostenerlo.
... ¡Eso es un libro! ¡Eso, no me digas, eso es un libro, ¿cierto?!
En el instante en que puse los ojos en el lomo dorsal de ese libro, el color regreso a mi mundo. Las pesadas nubes que había cargado en mi mente fueron instantáneamente expulsadas, y mi propio espíritu se iluminó en un momento.
“¡¡S... señor!! ¡¿Qué es eso?! ¡¿Cómo se llama eso?!”
“Ah, ¡eso es un libro!”
“¡Siiiii! ¡Finalmente encontré uno! ¡Los libros, ellos existen! ¡Podría ser sólo uno, pero existen!
Este libro ha eliminado mi persistente depresión de haber renacido en un mundo sin libros. Tiemblo de emoción mientras miro con anhelo su lomo dorsal. Es absolutamente demasiado pesado para que yo lo mueva, por lo que sería simplemente un adorno. Desde su apariencia, no hay manera de que él no sea prohibitivamente costoso, y no hay manera en que sea capaz de conseguir que mi madre lo compre para mí, sin importar lo mucho que insista sobre él. Sin embargo, si existen libros como este, entonces debe haber libros más pequeños, más fáciles de cargar por ahí también. Me giro para mirar al anciano, con mis ojos bien abiertos de hambre.
“Hey, señor, ¿dónde puedo encontrar una tienda que venda libros?”
“¿Una tienda de libros? No hay ninguna tienda así.” Él me da una mirada [Que demonios está hablando esta chica], y mi entusiasmo cae un par de niveles. Hay libros, así que ¿por qué no hay librerías?
“... ¿Huh? ¿Por qué? Usted está vendiendo uno aquí.”
“Los libros sólo se elaboran cuando las personas los transcriben de la obra original del autor, por lo que son demasiado raros y valiosos para venderlos en el mercado. Incluso éste aquí no está realmente a la venta, este objeto se mantiene como una garantía de alguien de la aristocracia. Bueno, si él no vuelve pronto, supongo que tendré que venderlo, pero el comprador probablemente será otro aristócrata.”
¡¡Aristócratas!! ¡Si yo estuviera realmente siguiendo las normas del renacimiento en un universo paralelo, habría nacido en la nobleza! ¡Yo podría ser capaz de leer! ¡¿Por qué soy sólo una plebeya?!
Los pensamientos de masacrar a la aristocracia brillan en mi mente. Están rodeados de libros desde el momento en que nacen. ¿Qué han hecho para merecer tal bendición?
“Señorita, ¿es este el primer libro que has visto?”
Aparto mis ojos del libro, asintiendo vigorosamente en respuesta a la pregunta del viejo. Sí, este es el primer libro que he visto en este mundo. Encima de eso, no suelen estar a la venta, y no hay librerías, y hay muchas posibilidades de que tal encuentro casual nunca vuelva a suceder. …¡¡y entonces!!
“¡S... señor!! ¡Por favor, escúchame!”
Con mis puños estrechamente unidos, me paro derecha y a continuación caigo de rodillas en frente del tendero. “¿Qué es todo esto ahora?”, él dice, con sus ojos abiertos debido a la sorpresa cuando me arrodillo delante de él.
Este no es sólo un deseo ocioso. Lo que necesito demostrar a este hombre es que este es el soporte en el corazón de mi fundación, y la demostración más sincera en el mundo es rogar sobre tus manos y rodillas. Inclino mi cabeza bruscamente, y hago todo lo posible para explicar mis sentimientos con la mayor claridad y franqueza posible.
“Quizás sea obvio que no puedo comprar ese libro, pero, al menos, ¡permítame tocarlo! ¡Déjame frotar mi cara contra él! Al menos, déjame olfatear, ¡déjame respirar el olor de su tinta! ¡Sólo eso sería suficiente!”
...El silencio que colmó el aire después de mi sincera solicitud fue casi doloroso de soportar, sin embargo, el tendero no respondió. Tímidamente, levanto mi cabeza para mirarlo. Por alguna razón, él parece que se ha tragado un insecto, o quizás es como si él hubiese visto un pervertido increíblemente asqueroso. Shock y disgusto juegan en su rostro mientras me mira.
¿Huh? ¿Mi sinceridad fallo en brillar?
“Yo... no sé si realmente estoy entendiendo lo que quieres decir, pero... creo que podría ser peligroso para mí dejarte tocarlo.”
“P... ¡¿pero?!”
Comienzo a reiterar mi apasionada solicitud, pero al parecer mi tiempo ha terminado.
“Maine, ¡esta hecho!”, dice mi madre. “Vamos a casa.”
“Mamá…”
Lágrimas comienzan a caer de mis ojos tan pronto como escucho su voz. El libro está ahí, pero nunca lo tocaré. Nunca lo oleré.
“¿Qué sucede, Maine?”, ella me pregunta, nerviosa. Una peligrosa mirada resplandece en su rostro, y ella se da vuelta para mirar al tendero. “¿Qué le hiciste a ella?”
Salto entre ellos y sacudo mi cabeza vigorosamente. “¡N... nada! ¡Nada!” Si no aclaro este malentendido inmediatamente, entonces estaría amontonando más problemas sobre el tipo viejo que me dejó refugiarme en su tienda y me enseñó acerca de los libros. Esta no es la manera de devolver un favor.
“No me siento muy bien. Mamá, ¿qué me hiciste beber? Me he sentido muy divertida desde que me desperté.”
“...... Ahhh, tal vez el licor que utilice para despertarte fue un poco demasiado eficaz. Vamos a llevarte a casa, conseguir un poco de agua y llevarte a un agradable y tranquilo lugar para descansar. Vas a estar bien.”
Mi madre asiente con su cabeza en comprensión, pero no parece que ella esté pensando en absoluto sobre si fue o no una mala idea haber dado alcohol a una niña en primer lugar. Ella toma mi mano, y con un tirón empieza a tirar de mí hacia casa. Miro detrás de mí mientras me alejo, y hago mi sonrisa más grande a los dos tenderos.
“¡Gracias por dejarme sentarme!”
No me incliné, como estoy acostumbrada, pero no es debido a que esté emocionalmente comprometida. Más bien, no recuerdo haber visto a nadie inclinando su cabeza, así que no creo que esa sea la costumbre aquí. Por ahora, seguiré sonriendo. Una gran sonrisa es indispensable cuando se trata con otras personas, y por la forma en que están sonriendo y agitando mi mano, parece que mi suposición era correcta.
“Maine, ¿aun te sientes mal?” Pregunta mi madre.
“…Sí.”
No hablamos mucho mientras caminamos hacia casa, de la mano. Miro las tiendas a lo largo de nuestra ruta a casa, y, por supuesto, no hay ninguna librería. Mi objetivo para hoy de coaccionar a mi madre para conseguir un libro para niños y quizás aprender algunas letras ha terminado en un completo fracaso. Incluso a pesar de que esta ciudad es el hogar del Señor de la tierra, incluso a pesar de que estamos rodeados por paredes tan espectaculares, no hay librería aquí. Si los libros verdaderamente no están a la venta, incluso aquí, entonces no debe haber una librería en ninguna parte del mundo.
Estoy desesperada. Nunca había pensado que Dios pudiese ser tan cruel como para obligarme a mí, Urano Motosu, la entusiasta de los libros quien podía ir un día o dos sin comer mientras tuviese un libro para leer, vivir una vida desprovista de libros.
Al menos, ¿por qué no nací como una noble?... ¡Sniff! Para reencarnarme como una plebeya... Dios... ¿qué hice para ganar este odio?
Incluso si digo que quiero que mis padres se conviertan en nobles para así ellos puedan comprarme libros, esas son sólo fantasías infantiles. Nunca diría que no quiero haber nacido en esta familia. En realidad, sin embargo, quiero ser una aristócrata. Si no puedo ser una aristócrata, por lo menos quiero suficiente dinero para poder comprar todos los libros de la herencia de un aristócrata denigrado.
Puedo estar atrapada en este terrible ambiente, pero sé por hechos que no importa cuán duro llore, no va a conseguirme un libro. Si no hay librerías, no puedo comprar un libro.
Entonces, ¿cómo voy a conseguir uno?
Simplemente voy a tener que hacerlos yo misma, ¿no?
Realmente, lo que verdaderamente quiero son libros de este mundo, pero eso es un lujo irrazonable. Para cumplir mis más urgentes deseos, voy a tener que dejar de aprender a leer el lenguaje aquí. En su lugar, voy a hacer libros en japonés, los cuales ya sé.
Aún no he averiguado cómo voy a hacer todo eso, pero eso no importa ahora mismo. ¡Definitivamente voy a adquirir un libro!